POR FIN!!!!!

La madrugada del 25 de enero ha sido la elegida por Castellana para parir a su potro. Obama de La Place, es el nombre que, después de muchas cábalas, propuestas y discusiones, incluida la de acudir al santoral para ver el santo del día, sus abuelos maternos han decidido ponerle.

Castellana demostró en este lance, la templanza y el saber estar que cabía esperar de una veterana y aguerrida yegua horseballera y, aun siendo madre primeriza, salvó la situación, sin ningún problema.

El potro, bayo, patilargo, ágil y simpático, pesó treinta y dos kilos y doscientos cincuenta gramos y midió, a la cruz, un metro diez centímetros al nacer. Cabe esperar, que después de los entrenamientos ya vividos en el vientre de su madre y de la educación y ambiente en el que le va a tocar crecer, podamos contar, en unos añitos, con un futuro crack del horseball. Ya hay quien le quiere poner una pelota con asas en la cuadra para que se vaya familiarizando y haciendo a la idea.

Con esta crónica queremos dar la enhorabuena en primer lugar a la madre y por supuesto a los abuelos, Sole y José Luis, al que podemos ver orgulloso en las fotografías junto al recién nacido, que parece tener claro quien le va a dar de comer después de su madre, y también a los demás amigos de La Plaza, sobre todo a los niños, que van a poder disfrutar cuidando y viendo crecer a este nuevo miembro del Equipo de los Sharks.

Al que de momento no podemos dar la enhorabuena es al padre, y aunque se plantean diversas opciones y presunciones, el C.P.R. (Centro de Parecidos Razonables), ha comenzado su trabajo de investigación y se mantiene alerta, con lo que esperamos poder contar en unos días con los resultados sobre este misterio de la naturaleza.

No os perdáis las fotos, que no es por nada, pero no tienen desperdicio.

Que lo disfrutéis!!!!

Carmen García-Gil y Pedro Checa